¿ Quién hoy desea algo vivo ?..

 

Baruch Spinoza, uno de los más grandes filósofos de la historia, decía que no podemos dejar de pensar, pero tampoco podemos dejar de sentir. La razón y los afectos –el amor, el odio, la compasión, la ira, la esperanza, etcétera– son, y deben ser, complementarios, pues ambos forman parte de nuestra naturaleza.

«No obstante, lo que nos mueve a actuar no es la razón, sino el DESEO, al que los afectos dan forma. Por eso Spinoza afirmaba que el DESEO es la esencia humana».

¿Quién hoy desea o sueña algo vivo?

Sí, alguna vez lancé esta pregunta como experimento social, y varias personas me contestaron algo parecido.

– Si pidieses tres deseos ..¿Que pedirías?.

«Mi primer deseo es tener más deseos, o ser lo bastante inteligente para hacer una elección perfecta de los otros dos deseos».

– Y…¿Cuáles son tus otros dos deseos?

«No sé, de momento no tengo más deseos»….

Todo esto me resuena a nada vivo, a conford, hastío, miedo a perder la cordura o quizá el amor. Pero los deseos y los sueños de verdad …¿ Dónde están ?.

Si pensásemos profundamente o sientiésemos un gran deseo y tenemos la gran certeza de que por arte de magia nos fuese concedido.. ¿Sabríamos realmente que desear o que pedir hoy?..

No olvidemos que el mero hecho de que exista la vida ya es pura magia, pero queremos ser tan cuerdos con todo, que quizá nos olvidamos de tener un  auténtico deseo o sueño de verdad; de los que realmente te gustaría bajar a tierra.

Y si tuviésemos simbólicamente una lámpara mágica en las manos y que al encenderla supieses perfectamente que tu deseo es mágicamente concedido…. ¿Sabrías diferenciar entre lo que se cree desear y lo que realmente se desea no hay diferencia alguna?…..Diría que evidentemente sí.

Y por otro lado…¿Nos atreveríamos a traspasar el umbral de un lugar simbólico en el que nos concediesen no lo que pidamos o aquello que creemos desear, sino nuestro deseo más íntimo, profundo y escondido?…

Hace muy pocos días, en Navidad, una persona muy allegada y tan querida, me regaló una espectacular reliquia histórica del pasado, «una bellísima lámpara» de aceite. La intención del regalo era rememorar aquella mágica lámpara de pedir profundamente tres un deseos, simulando a los cuentos de Aladino.

Al cogerla sentí entre mis manos su enorme peso y la responsabilidad de tenerla conmigo, el frío y el calor de un noble metal, el callado silencio que nos grita y chilla, el miedo intentando resistirse a la verdad, y sobre todo su incalculable valor.
Al poco tiempo de acariciar su contorno comenzaba a  notarla más liviana, ligera, caliente, y al mismo tiempo me costaba retener alguna que otra lágrima, así que la dejé en la mesa, la observé minuciosamente con detalle y la volví a coger, otra vez la misma sensación de pesada a liviana, de fría a caliente….un antiguo aroma viajaba en el recuerdo del olvido….¿Serían acaso los inocentes y generosos deseos negados, rechazados de un niño en el olvido?.

Unos meses atrás tuve la gran fortuna de alcanzar la plenitud, conocí a una alma  maravillosa que sigilosamente me brindó y me concedió alcanzar mi fantástico sueño después de un largo camino, mi gran deseo después de 40 años. Y a pesar de que el tiempo es nuestro auténtico dueño, aunque en este caso es irrelevante, lo que importa es la fuerza del deseo, la intensidad  que viaja retenida en el tiempo sin tiempo.

No siempre disponemos de lámparas mágicas, quizá nos vale cualquier objeto simbólico que tengamos a mano, o un lugar especial que le damos nuestro propio valor. En mi caso era una fantástica habitación universal, cada uno sueña con su realidad, algo loco y mágico si es, quizá será el valor que cada uno le ponemos…Sí, metafóricamente como la habitación mágica de los deseos de la película «Stalker» de Andrei Tarkovski.

Cuando entré en aquella estancia con el deseo retenido por alcanzar después de tantos años, bastó un solo segundo y se esfumó, quedé totalmente sorprendido, al final salió otro; el auténtico deseo de aquello tan íntimo que  sigilosamente llevaba tan bien guardado. Bien es cierto, que en vida nunca lo veré, pero sí hablamos de tiempo de Cronos , tengo Fe que quizá dentro de doscientos, trescientos, cuatrocientos o quinientos años, germine su semilla y florezca.

Y allí plantando esta Rosa….. culminó un largo y pesado viaje, dejando la  vieja armadura colgada en el portal .

 

rose wish
La esencia

Y desde «empezando por el fin » , vuelvo al inicio;

¿Quién hoy Desea o Sueña algo vivo ?

¿Será que no deseamos o no soñamos, porque algo perderemos a cambio?.

…..¿Que será?…..

wish
 
Gracias Ana, por esta preciosa lámpara de los deseos y los sueños. Y como conoces bien mis retorcimientos, no puse de fondo al azar el mejor cuadro de mi casa «Eros y Psique»….El beso del Deseo despierta el Alma. –  Eros (deseo) y Psique (Alma). Y como bien dice Spinoza…  » lo que nos mueve a actuar no es la razón, sino el deseo; la esencia humana».

P.D.

Para quién le quede todavía algo de paciencia, o para quienes aún no abandonaron por aburrimiento después de leer este pensamiento.. Felicitarlos y decirles que poseen un gran aguante, un mérito desorbitante. Soy consciente de que hoy en día nos hemos acostumbrado a las lucecitas de los titulares y a continuación a opinar simultáneamente por todo, sin buscar o recabar datos, o mirar detrás de los contenidos. Así que para aquellas personas que aún les resuena en su interior alguna palabra, dejó un comentario sobre la película Stalker (1979) del gran cineasta Ruso, Andrei Tarkovski.

Stalker es una película de poesía visual, donde el metraje de las escenas transcurre a un tiempo lento, aveces escenas de cuatro minutos sin diálogo entre personajes, donde invita a la filosofía y a la reflexión observando los personajes y las acciones que van apareciendo. Aunque por otro lado, hoy en día dudo que seamos capaces de aguantar un metraje de más de dos horas con esta lentitud, nuestra continúa exposición a los destellos y a los continuos flashes de imágenes corridas de nuestras queridas pantallitas táctiles, no lo vamos a soportar, nuestra mente explotará de impaciencia, igual que por otro lado cada día soportamos menos el silencio, la verdad, así como la ausencia del deseo y los sueños.

La acción de Stalker se sitúa en un tiempo y un lugar indeterminado tras el supuesto impacto de un meteorito en lo que, desde ese momento, se conocerá como la Zona. Las autoridades, en su burocrático afán de secretismo, decidieron impedir el acceso al lugar de la catástrofe. Pero como de lo desconocido surge lo misterioso sin apenas esfuerzo, al poco tiempo comenzaron a circular rumores que afirmaban que en la Zona había una Habitación en la cual, simplemente por entrar, tu deseo más íntimo se haría realidad.

Así, de lo misterioso se pasó a lo milagroso y eso disparó las esperanzas de muchos. Como el acceso a la Zona estaba prohibido, surgieron unos individuos, los stalkers, que, por unos dineros, conducían clandestinamente a desesperados a la Zona y a la Habitación. Los protagonistas de la película son un «Stalker» y sus dos clientes, dos personajes también sin nombre: «Profesor» y «Escritor».

Es fundamental tener en cuenta que en la Habitación no se concede «supuestamente» el deseo que se cree tener y que se pide, sino que se concede el deseo más profundo e íntimo sin que sea necesario explicitarlo. Habrá quién piense que entre lo que se cree desear y lo que realmente se desea no hay diferencia alguna.

Para poner en duda esa seguridad, en la película se cuenta la historia de un individuo –otro stalker al que llaman «Puercoespín»– que contribuyó a la muerte de su hermano en la Zona. Devastado por el arrepentimiento decidió entrar en la Habitación para que se le concediera el deseo de ver a su hermano resucitado. Cuando llegó a su casa no encontró precisamente a su hermano, sino un buen montón de rublos. «Puercoespín» no entendió que la Habitación no era una ventana a otro mundo ideal, sino un espejo que le devolvió una imagen tan terrible de sí mismo (la de un soviético rey Midas en potencia) que, una semana después, decidió ahorcarse. Quién sabe, quizá nuestro deseo más íntimo es una cosa absolutamente trivial, o peor todavía, algo que nos horrorizaría conocer e incluso podría arrasar nuestra vida, como le sucedió a «Puercoespín».

Lo sublime de Stalker reside precisamente en todo lo que la hace majestuosamente tediosa: si, ese hastío del principio no desanima y si se tiene paciencia, la película puede comenzar a despertar interés; si tampoco se desiste en esa fase, quizá se descubra que el aburrimiento se va convirtiendo poco a poco en una forma de atención de especial intensidad. Llegado ese momento, probablemente falte poco para convertirse en uno más de ese grupo de peregrinaje a la Habitación. Y si se resiste hasta el final no sólo se verá la Habitación, sino que incluso se entrará en ella.

Así que será mejor que antes de dar el último paso se reflexione acerca de si conocemos lo suficiente de uno mismo, el deseo más íntimo, más profundo y quizá más desconocido, se pueda hacer realidad.

(En estas últimas líneas finales sobre la síntesis de Stalker, algo me ayudé de un <<copia/pega>>, como solemos hacer muy habitualmente hoy en día con casi todo)

2ª P.D.

Disculpen mis faltas ortográficas y sentido de elocuencia narrativa, lo cierto es que mis queridos padres con su mejor amor e intención y un enorme esfuerzo económico brutal,  me mandaron a la escuela reglada para intentar que aprendiese no se qué…. lo cierto que una vez allí me tomé la libertad de no prestar la suficiente atención por no desaprender lo que ya traía de cuna. Por lo tanto, aprovecho en este hermoso momento para mandarles estén donde estén , el mejor de mis abrazos y la mejor sonrisa de mi corazón, lo que me aportaron ellos no se imparten en las escuelas.

EN ALAS DE LA MENTIRA
La mentira es algo que se esconde
para no tener que existir
no hay porque desconfiar
si la locura ha decidido ya por ti.
Cierro los ojos y bailo
al borde del tejado
podría volar.
Ha venido un ángel y el cielo existe
ya no tengo más que decir
mis presentimientos han estado huyendo la verdad.
Cierro los ojos y bailo
al borde del tejado
podría volar.
Cierro los ojos y bailo
al borde del tejado
podría volar.
Los sueños desbordan al tiempo
que la vida no puede medir
ahora ya que importa si un día tuviera que morir.
Cierro los ojos y bailo
al borde del tejado
podría volar.

2 comentarios en “¿ Quién hoy desea algo vivo ?..”

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s