«La manipulación mediática hace más daño que la bomba atómica, porque destruye los cerebros».
Da tristeza saber que alguna gente de 20 años ya anda medicándose sin saber de qué, antidepresivos y otras sustancias libres. Justamente en su lanzadera de esplendor de fuerza, rebelión y sueños. No, no es casual.
La sobrecarga de excitación mental de continuos flashes o mensajes que parecen inocuos, ya hace mucho tiempo que empezaron a generar sus efectos en jóvenes y adultos. Y cada día poco a poco, sigilosamente nos va alejando de la realidad y sobre todo de nuestro Ser, por tener que «ser o aparentar» otra cosa que no somos, convirtiéndonos en la idiotización de la sociedad; seres vacíos.
Si ya arrastrábamos una ardua tarea de romper con una infinidad de antiguas creencias y costumbres alimentadas por nosotros, ahora en este nuevo estado de shock, la manipulación es mas fácil. Y lo mejor de todo, es que lo sabemos y nos da lo mismo. El inminente bombazo futuro que nos viene será apoteósico.
Dejo este enlace que encontré trivialmente, una primera capita de la cebolla: